Una campaña de marketing con incentivo no es una acción que se pueda ejecutar sin pensar en los pasos correctos antes. Requiere plantearse una serie de elementos clave para su buen funcionamiento y que ayude a la consecución de objetivos de la misma. La precipitación puede llevar a una situación en la que no haya un buen retorno de la inversión y no poder justificar la inversión en el incentivo. Las personas que van a intervenir en este proceso van a ser: el responsable de compras o gerente para determinar el presupuesto de la ación y determinar cuánto se puede gastar la empresa en el propio incentivo y la posterior promoción. Por otro lado, el responsable de marketing decidirá el tipo de incentivo o regalo promocional a incorporar y las técnicas de publicidad para darle repercusión. Por último, el responsable de atención al cliente para coordinar el seguimiento del propio incentivo.

Cómo llevar a cabo una campaña de marketing con incentivos

Etapa de planificación

Esta etapa es muy importante porque en la estrategia escogida radica el éxito o fracaso de la campaña. Hay que poder responder a algunas preguntas clave: ¿Quién es el cliente potencial? ¿Cómo le puedo impactar? ¿Qué tipo de incentivo le puedo ofrecer para incrementar las ventas? También habrá que determinar la inversión y retorno que se espera de todo esto.

Etapa operativa

Aquí se implementará todo lo que se ha planificado. Principalmente, los diseños gráficos de la campaña, los canales de promoción y también las primeras pruebas con clientes para comprobar si la promoción se entiende y se cumplen los plazos de entrega. Esta etapa también es necesaria para hacer las primeras correcciones, ya que es difícil acertar en todo desde un inicio. Siempre hay margen de mejora y optimización con el objetivo de mejorar los resultados obtenidos.

Etapa de medición y análisis

Lo que no se puede medir, no se puede mejorar. Esta es la ley universal de la analítica. En este punto, y con datos en la mano, podremos saber si la campaña se puede considerar un éxito o no. Lo más importante es hacer la medición por etapas: número de impactos publicitarios, números de contactos, número de ventas y número de bonos canjeados. De esta forma, sabremos exactamente en qué punto hay margen de mejora para futuras acciones o para reorientar la misma campaña.
 
Estas 3 etapas deben de ir de la mano y con un mismo sentido estratégico. Si todas estas acciones se llevan a cabo bajo unos mismos objetivos, es mucho más sencillo obtener resultados satisfactorios. ¿Consideras acertadas estas 3 etapas para una campaña de marketing con incentivo?